Te encantan los animales pero ¿cada vez que estás cerca de uno empiezas a estornudar, sientes comezón y te lloran los ojos? Probablemente seas alérgico a los animales. Descubre cómo causan alergia los animales y cómo tratar las alergias.
Al igual que las personas, los animales también renuevan su piel, la cual se va desprendiendo poco a poco en partículas o escamas microscópicas que se quedan flotando en el aire.
Dichas escamas o caspa son la principal responsable de la alergia a los animales.
Cuando las personas las respiran, es cuando pueden empezar a sufrir los primeros síntomas de alergia.
Y debido a que el pelo de los animales se cae al piso y no se queda flotando en el aire, es menos frecuente que pueda causar alergia.
Ahora bien, las personas (por lo general) se hacen alérgicas a los animales con los que tienen más contacto.
También, una persona puede ser alérgica a la saliva de los animales cuando los síntomas aparecen en la piel después de haber sido lamido en alguna zona del cuerpo, o si tocó al animal después de que éste se estuvo lamiendo. Hay otras personas que son alérgicas a la orina, ya que al evaporarse pasa al aire.
Síntomas que causa la alergia a los animales
Son los mismos de otras alergias a sustancias ambientales:
- Conjuntivitis
- Asma
- Rinitis
- Edema o inflamación
- Urticaria
Animales que causan alergias
Los que causan más alergia son:
- Gatos
- Perros
- Caballos
- Conejos
- Hámsteres
- Hurón
- Cabra
- Chinchilla
- Ratón
- Vacas
- Ovejas
¿Cómo tratar alergias que causan los animales?
Lo más eficaz, en estos casos, es evitar todo contacto con el animal responsable de la alergia. Si es un animal doméstico, lo mejor es retirarlo de la casa. Ten en cuenta que la caspa puede persistir por varios meses aunque se haya sacado de casa al animalito.
Si deciden no deshacerse de la mascota familiar, deben disminuir el riesgo de alergia con los siguientes consejos:
- Estar en contacto lo menos posible.
- La mascota no debe entrar ni dormir en la misma habitación de la persona alérgica.
- Bañar al animalito con frecuencia con productos que ayudan a que no desprenda tanta caspa.
Evitar acudir a casas o lugares donde haya animales y si un miembro de la familia trabaja con animales, debe ducharse y cambiarse de ropa antes de regresar a casa.
También hay tratamientos que se aplican cuando aparecen los primeros síntomas o buscar un tratamiento preventivo de acuerdo a la gravedad de los síntomas.
Cuando no se puede evitar el contacto con los animales, hay un tratamiento inmunoterápico.
Por último, es importante saber que la exposición constante con el animal va causando una inflamación que se puede hacer crónica, aunque aparentemente no cause ningún síntoma o sean intermitentes, e inclusive, de poca intensidad.
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Fuentes: En Familia AEP, pacientes.seicap.es
